El objetivo fundamental de la formación además de transmitir conocimientos es transformar a la persona, acompañar al alumno en su crecimiento, en su desarrollo personal.
Educar, en definitiva, no es enseñar a alguien algo que no sabía, sino hacer de él alguien que no existía.
Ser profesor no es sólo saber unos contenidos y explicarlos es mucho más; es facilitar el proceso de aprendizaje en nuestros alumnos.
Recordemos unos algunos comportamientos de nosotros como profesores para poner en práctica estos principios
- Sé un modelo para el alumnado. Refuerza tus mensajes con tus comportamientos, con esto lograrás que tus alumnos sientan tu autenticidad.
- Reglas claras, amistades largas. Es conveniente que hagas participar a tus alumnos para lograr un consenso sobre las reglas de funcionamiento en el aula, de tal manera que ellos las asuman y las respeten.
- Presenta experiencias positivas. Busca que los alumnos disfruten con lo que tú les presentas, crea escenas que les posibiliten su aprendizaje. Evita los juicios negativos.
- Detecta y elimina conductas inadecuadas. Es mejor cortar de raíz aquellos aspectos que promueven comportamientos inadecuados.
- Promueve la participación del grupo. Esto logrará un mejor ambiente, ordena tus materiales y las experiencias de aprendizaje
- Busca tomar decisiones en consenso. Evita hasta donde sea posible Imponer decisiones.
- Genera un espíritu de pertenencia. Efectúa actividades que contribuyan a la comunicación y trabajo en equipo.
- Reta a tus alumnos a lograr ser excelentes. Impulsa los objetivos que parecen difíciles de alcanzar y comunícales que ellos pueden lograrlo a través del su inteligencia y capacidad.
- Impulsa la comunicación dentro del aula. Promueve la escucha hacia los demás y la empatía, ten presente que una escucha activa es como el motor del aprendizaje.
A través de tu lenguaje no verbal transmíteles que son ellos los que verdaderamente te importan. - Estimula las emociones que abren posibilidades. Sabemos que sin emoción no hay aprendizaje por lo que es muy importante aprovecharlas y ponerlas a nuestro favor. Recuerda que las emociones se contagian por lo que, si tú generas una emoción positiva en ti, los alumnos se contagiarán de ella.
Tus opiniones y comentarios son muy valiosas para construir juntos una menor experiencia docente, ponte en contacto con nosotros a través de nuestro blog o envía un correo a info@inspiracentro.com Mtro. Gerardo Jiménez León | Inspira. Centro de Aprendizaje